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Cuando queremos presentar nuestro bonsái a una exposición
debemos seguir una serie de normas precisas para que las personas encargadas de
la elección tengan en cuenta nuestra composición. Mesas, acento, kakejiku, bonsái,
categoría a la que pertenece la composición, grado de salud, cantidad de
alambre… son detalles importantes para pasar el corte.

Sin embargo viceversa no se da este grado de exigencia.
Nadie pregunta ¿cómo se va a exponer mi composición? ¿Me tocará en la esquina y
no habrá manera de sacar una foto decente? ¿Se repartirá equitativamente el
espacio disponible para que mi bonsái tenga sitio suficiente y luzca? ¿A qué
altura colocaran las mesas?, ¿Y los fondos qué, estarán planchados, me tocará un
corte justo en medio de mi bonsái? ¿De qué color serán las telas, fondos y
manteles? Estarán bien cortadas y planchadas o lucirán cortas y escuetas
mostrando  las patas de las mesas de
cervecera. ¿Estaremos en penumbra o la luz será buena o tal vez  indirecta? No es lo mismo que mi bonsái este
colocado al lado de éste que de éste otro. ¿Tendrán en cuenta las alturas, las
especies….para situarlos?

Como podéis ver, cantidad de detalles que parecen nimios
pero que pueden arruinar nuestra composición.

Pidamos exposiciones dignas con un mínimo de calidad.

Aprovecho y coloco unas fotos de la Noelanders Trophy de
este 2018. Generalmente una gran exposición.